Por: Yuliana Serna Para ser minero como decía mi papá solo se necesita tener verraquera y dedicación, pero mas que eso tener mucha fé en la virgen del Carmen.
Ser minero no es oficio fácil, así lo expresan los que llevan este oficio en la sangre y los que por circunstancias de la vida les toco llevar en sus manos un pico y una pala para sobrevivir. Sin embargo, aunque este es un oficio de alto riesgo, en una de las visitas a la mina “La Espiga”,ubicada entre los límites de Fredonia y Venecia del suroeste Antioqueño. Varios de éstos trabajadores han demostrado que el peligro no es un obstáculo cuando se hace lo que les gusta.
El minero convive mas con la oscuridad que con la luz, pues en algunos casos son más de 8 horas que sus fuertes manos apuntan con el pico a un mineral que les da el pan de cada día. Para el minero es muy importante la fé e iniciar el día con una bendición y una oración a la virgen del Carmen, ya que según ellos es su protectora, después de eso trabajan con mucha tranquilidad, pero no con mucha seguridad ya que a veces no se sabe lo que pueda pasar. Este es un oficio que oscurece el cuerpo pero enriquece el alma, la enriquece por que este trabajo es y será de mucha valentía.
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